Llevo investigando desde hace unos meses las comidas sin gluten. Tengo una amiga con ese problema. Se lo han detectado sólo hace unos cinco años y en todo este tiempo, según me cuenta no prueba las magdalenas que le rechiflan. Tanto hablamos del tema que me empiezo a preocupar por su estado de bienestar en cuando a sabores y texturas, en cuanto a antojos a los que no puede tener acceso como unas simples magdalenas, antojos que yo nunca tuve pues puedo comer de todo y ni se me había pasado por la cabeza que muchísima gente puede tener este problema. Tanto es así que me dediqué de lleno a investigar productos adecuados. Tengo en mi cocina unos cuantos que se adaptan a este tipo de alimentación y si tengo unas horas libres las dedico a investigar y cocinar. He hecho varios tipos de magdalenas y por fín encontré estas que son riquísimas, sube la masa (no como otras) e incluso me atrevo a decir que son más ricas que las elaboradas con harina de trigo. También con esta base he añadido otros ingredientes a mayores para intentar que se pareciesen a los "sobaos" y sale estupenda la receta. Además con esta misma receta se pueden hacer incluso tartas cambiando la forma de los moldes y rellenándolo al gusto y la necesidad. Es por esto que gracias a mi amiga os lo puedo contar. Hace unas semanas preparé estas magdalenas y se las llevé a mi amiga. Mientras tomábamos un café, empezó a quitarle la cápsula de papel a una magdalena, eramos varias mujeres tomando café y la mirábamos embelesadas...¡cómo saboreaba la magdalena! ¡ni siquiera escuchaba lo que estábamos hablando!. Se emocionó y nos dijo que hacía muchos años que no las podía comer y a mí me encantó poder hacer su sueño realidad y vivirlo con ella. Fué muy emocionante. Pasados unos días le volví a llevar otras hechas con la misma receta pero incluyendo miel, nueces y un poco de aceite. Salieron exquisitas y ella está encantada. Tengo que decir que siempre con miedo, le presenté las magdalenas con la receta escrita en un papel. Le hice mirarla con lupa, no vaya a ser que alguno de los ingredientes le sentara mal y tuviéramos que trasladarnos de inmediato al hospital. Pero no, le sentaron divinamente y ahora os lo cuento por si alguna tenéis ese mismo problema, la intolerancia al gluten y podáis disfrutarlas como mi amiga.
INGREDIENTES:
200gr. MANTEQUILLA
200 gr. AZÚCAR
PIEL DE NARANJA Y LIMÓN
4 HUEVOS
200 gr DE MAICENA
1 SOBRE DE LEVADURA
UN PELLIZCO DE SAL
PREPARACIÓN CON TERMOMIX:
Pulverizar el azúcar 1 minuto, velocidad 5,7,9 progresivo.
Añadir las pieles de naranja y limón y repetir la operación.
Agregar los huevos con la mariposa puesta y programar 2 minutos, velocidad 40, 40º.
Dejar batiendo 2 minutos más e incorporar la mantequilla. Batir de nuevo 6 minutos a velocidad 3.
Añadir la Maicena, levadura y sal. Mezclar todo 6 segundos a velocidad 3.
Verter la masa en cápsulas de magdalenas llenándolas sólo hasta la mitad. Espolvorear con azúcar e introducir al horno a 200º, bajar a 180º y cocer 15 o 20 minutos.
PREPARACIÓN TRADICIONAL:
Moler el azúcar y las pieles de naranja y limón. Añadir los huevos batidos y mezclar muy bien.
Añadir la mantequilla (antes dejarla un poco a temperatura ambiente, que esté blandita) y batir mucho hasta que se integre bien.
Añadir la Maicena tamizada, la levadura y la sal y mezclar todo muy bien, batiendo.
Verter la masa en las cápsulas de papel sólo hasta la mitad y espolvorearlas con azúcar.
Hay un truco para que las magdalenas queden mucho más bonitas. Intruducir las cápsulas de papel con la masa dentro en los moldes que tengáis de flan pequeños. De esta manera sujeta mucho mejor la masa y hace que no se desparrame, sube y quedan más lucidas.
¡Listo!
te han quedado de vicio dame una me apetece con un cafecito....pasate por mi blog que yo me quedo un ratillo por aqui bess
ResponderEliminarMe paso ahora mismo dulce. Muchas gracias por tu comentario.
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