Hace muchos, muchos años, que conozco a Patricia Mackinlay, de hecho, estudiamos juntas en el mismo colegio y la misma clase.Y hace poco, poco tiempo nos volvimos a encontrar entre amigos comunes. Tal fué nuestra alegría, que hicimos planes enseguida: ¡vamos a hablar!, ¡quedamos!, esto, lo otro, ¡tomamos un café!...El tal café, no llega nunca, pues las dos tenemos mucho que hacer, pero Patricia, no se me olvida, aquí está "nuestro café". No tendrá aroma, no disfrutarás de mi compañía, (ja, ja...), pero que sepas que estás en mi corazón. Un beso muy muy fuerte a mi amiga y compañera de juegos y que sepas que siempre, siempre me tendrás por aquí.
Pues cuando la veas recuérdale que me debe la receta del boleardo.
ResponderEliminarUn beso pa las dos.
Tu Juan_Ito
Con mucho gusto se lo diré y también te digo quela estuve buscando (la receta), pero es imposible, la tienen guardada como alto secreto. Aquí, el boleardo más famoso es el de Camos, en Nigrán. Lo hacen con manteca y es el mismo de cuando yo era pequeña. Cuando quieras, te mando uno o dos o tres, lo que no sé, si te llegaría fresco. Un besito, y gracias por el comentario.
ResponderEliminarHola Xela, que buena pinta tiene todo, sobretoddo esos bollos dulces por no decir los platos riquísimos y caseros que nos preparaba mamá, los huevos encapotados, el pastel de carne, los fritos de plátano uuuhhhhmmmm..., ahora se los hace a los niños que cómo no, les encantan y luego me los piden a mí, qué listón más alto... Besiños, Kika
ResponderEliminarSi, mamá es una gran "maestra" en la cocina. De ella aprendimos y seguimos aprendiento. Con esa soltura y elegancia que tiene me hipnotiza y su manera de mover esas manos tan perfectas que tiene, cuando se trata de decorar una fuente, o una tarta... da gusto verla. Es que todo lo hace bien. Nosotras somos "imperfectas", ja, ja...
ResponderEliminar